Tal y como decía Edison: «No he fracasado. Simplemente he descubierto diez mil alternativas que no funcionan»
¿Por qué siempre vemos el lado negativo del fracaso?
¿Por qué nos aterra tanto equivocarnos? ¿Qué nos impide avanzar?
Si buscamos en la «Real Academia Española de la Lengua» su significado, tenemos que el fracaso es un «suceso lastimoso, inapropiado y funesto»
No voy a entrar en si es lastimoso y/o funesto porque sí, hay que reconocerlo, es cierto que nos «lastima» no conseguir lo que nos proponemos, a ninguno de nosotros nos gusta, pero…
¿ inapropiado ?
Inapropiado sería si no aprendiera más sobre mi misma, si no me enseñara sobre las consecuencias, si no me fortaleciera en futuras situaciones, si no impulsara a reaccionar, en definitiva, si no me enseñara a vivir.
En cierto que es difícil asumirlo porque las consecuencias nunca son buenas, y es verdad que quizás se ha frivolizado demasiado al respecto porque parece que es un tema de moda, pero la vida se forja a base de éxitos y fracasos y personalmente creo que para valorar los éxitos primero uno debe valorar los fracasos.
Me quedo con una frase de J.L. Borges que lo resume todo,
«Si pudiera vivir nuevamente mi vida, en la próxima trataría de cometer más errores»