Con este lema, Campofrío nos ha sorprendido un año más con un spot navideño de los más patriótico.
Teniendo en cuenta los tiempos que corren y lo complicado que está el panorama laboral en España, es normal que muchos hayan tomado la dura decisión de irse al extranjero a probar mejor suerte.
En este anuncio, al igual que el año pasado, se pone de manifiesto la triste y desoladora situación que sufren muchos españoles con la crisis. El del año pasado era un spot lleno de optimismo, de ganas de luchar, de avanzar. En cambio, creo que este año Campofrío se ha equivocado de pleno. Ha querido ponerle un toque de humor a algo que precisamente no lo tiene. Me refiero a que en el spot aparecen diferentes «celebridades» españolas que van eligiendo nacionalidad según les convenga. Emigrar no es nada fácil, las personas que toman esta decisión no lo hacen porque quieren. En muchos casos no tienen otra elección, van dónde pueden y cómo pueden. No es una cuestión de elección. Es por esta razón por la que me parece una falta de respeto a todos esos españoles que se han ido a buscar fuera lo que en este país no pudieron encontrar.
Totalmente de acuerdo. Muchos de los que emigramos no lo hacemos porque queremos, sino porque no nos queda otra opción.